Estos son los cinco mejores discos de Kiss según Paul Stanley: “Por diferentes motivos”

 

El frontman de Kiss elige los cinco mejores trabajos de su carrera

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En una nueva entrevista con el podcast Broken Record (vía Blabbermouth.net), Paul Stanley, frontman de Kiss, ha elegido los cinco mejores discos de la banda según su propio criterio.

Un directo, su primera elección  

“¡Por diferentes razones, el primero tiene que ser 'Kiss Alive!'. Porque 'Kiss Alive!' captó realmente la esencia de la experiencia en directo. Eso no habría sido posible sin entrar en el estudio, mejorarlo y rodearte de gente... Los discos en directo eran aburridos durante cuatro horas. Ni siquiera sabías que eran en directo hasta el final de la canción, cuando oías algunas palmas. Pero para Kiss, queríamos un álbum que te sumergiera, sumergirte en la experiencia, lo que significa estar rodeado de gente, lo que significa que estallen bombas ensordecedoras, lo que significa arreglar cualquier error o una cuerda rota. Puede que los snobs o los puristas despreciaran esa idea, pero lo cierto es que ese álbum sigue considerándose, si no el mejor, uno de los mejores y, en muchos círculos, el mejor álbum en directo de la historia. No porque todo fuera en directo, sino porque captaba la experiencia del directo".

'Destroyer'  

La segunda elección de Stanley fue el cuarto disco de Kiss, 'Destroyer', publicado allá por 1976, producido por Bob Ezrin, también conocido por trabajar con Alice Cooper: “'Destroyer', aunque no sonaba muy parecido a sus predecesores, pero trabajar con Bob Ezrin fue toda una educación, una escuela, una disciplina y un aumento de la composición y dejar de lado, al menos temporalmente, todas las canciones sobre acostarse con este o este grupo de tus fiestas, y subió el listón. Muchas de esas canciones acabaron en nuestros conciertos hasta el final: 'Detroit Rock City', 'God Of Thunder', 'Beth', 'Shout It Out Loud'".

 'Sonic Boom', una elección ¿inusual?  

Después, Stanley eligió un álbum un tanto inusual, el 'Sonic Boom' de 2009, el primero con Tommy Thayer a la guitarra: “'Sonic Boom' fue un gran álbum de una banda que reconoció sus raíces y reconoció de dónde venía y recogió el testigo y siguió avanzando. Me encanta ese álbum, y me encanta el espíritu que había en él, donde todo el mundo sabía lo que quería hacer, y en nuestro mejor momento. Y lo mejor de la mayoría de la gente, creo, viene de intentar hacer mejor al equipo o a la banda o a lo que sea en lo que estés involucrado, y eso te hará parecer mejor que simplemente intentar parecer mejor tú mismo. Y el espíritu de equipo en 'Sonic Boom' era muy, muy palpable. Es un gran álbum. Un gran álbum. Y si una canción como 'Modern Day Delilah' hubiera estado en 'Rock And Roll Over', sería un clásico. Pero las canciones tardan décadas en adquirir ese tipo de pátina o tener esa conexión vital de cuando escuchaste esa canción en un momento determinado de tu vida. Así que, con el paso del tiempo, las canciones podían ser geniales, pero no tenían el brillo de estar ligadas al pasado. Así que si se trataba de 'Modern Day Delilah' o 'Hell Or Hallelujah' [del álbum de 2012 'Monster']... Y me encontré diciendo: 'Eso es lo mejor que hay'. Y ahora es un momento diferente, y la gente no se conecta a las canciones como piezas de tiempo o una fotografía sónica de un cierto período. Así que 'Sonic Boom' estaría entre los tres mejores".

'Rock and Roll Over'  

El siguiente elegido por Paul fue, precisamente, 'Rock and Roll Over': “Me gusta ese álbum. ¡No suena ni de lejos como sonábamos nosotros, y eso después de 'Kiss Alive! Fue muy difícil para nosotros, tal vez debido a algunas de las personas con las que estábamos trabajando. Simplemente se nos escapó. Hicimos algo con verdadera concentración y claridad de lo que hacíamos, así que eso es muy bueno".

Un directo para terminar  

¿Y para terminar? Pues otro directo. Stanley afirma que su quinta elección sería 'Kiss Unplugged', grabado en el programa de televisión 'MTV Unplugged': "Me encanta 'Kiss Unplugged'. Ese álbum, acabo de escucharlo hace un par de días. La banda en ese momento estaba que ardía. Sin efectos, sin amplificadores, sin correr de un lado a otro: nosotros con las guitarras y la batería y cantando como locos. Y también nos dio la oportunidad de mostrar las canciones, porque siempre me he adherido a la idea de que una buena canción se puede tocar con una sola guitarra. Si tienes que decir: 'Bueno, espera a oír los efectos de sonido de esta canción'. No. Una gran canción se puede desnudar, y es fantástica. Así que escuchar 'Sure Know Something' o 'I Still Love You', escuchas esas canciones y hay un factor 'wow' simplemente porque son así de buenas. Yo pondría 'Kiss Unplugged' ahí... Me encanta su sencillez y el hecho de que sea innegable. Sólo son cuatro tíos con sus instrumentos".